sábado, 11 de abril de 2009

CRÍTICA AL ARTÍCULO “EL TUERTO”, PAUL KRUGMAN.

TEMÁTICA DEL ARTÍCULO


1. En alguna parte autor leyó que para entender a cabalidad la legislación hay que buscar la cláusula que le da un trato especial al hombre tuerto, barbado y cojo, es decir, uno tiene que buscar la cláusula que convierte a una propuesta que está ostensiblemente orientada a una causa pública en una concesión para satisfacer intereses particulares.
2. La mayoría de los comentarios que se hicieron a los programas de “estímulos” que fueron aprobados por la Cámara la semana pasada, se enfocan en los beneficios que otrogan a las grandes corporaciones. Pero eso no nos dice mucho sobre los intereses especiales que se están satisfaciendo. Lo que es bueno para la Norteamérica corporativa, es bueno para General Motors.
3. Una parte de la propuesta está cuidadosamente diseñada para beneficiar a un pequeño grupo de firmas financieras multinacionales.
4. Otra parte está claramente dirigida a beneficiar a ciertos aseguradores de la salud.
5. La cosa más notoria es cuánto del beneficio de abolir el impuesto mínimo alternativo, va a compañías que no son tan grandes.
6. Ejemplos: General Motors con sus 380,000 trabajadores, obtendría un cheque por 800 millones. TXU con 16,000 empleados obtendría un cheque por 600 millones. Quedan a la espera de recibir beneficios sorprendentemente grandes dentro de estas compañías: Chevron Texaco, Enron, Phillips Petroleum, IMC Global y CMS Energy ¿Qué tienen ellas en común?
7. Ellas tienden a estar en el sector de la energía o de la minería y tienden a tener su base principal en, o cerca de, Texas. En otras palabras, el hombre, tuero, barbado y cojo se parece mucho a Dick Cheney.
8. Con tal certeza se puede decir que hay mucha superposición entre las compañias que derivaráin grandes beneficios de la abolición del impuesto mínimo alternativo y las que recibirían grandes subsidios bajo el plan de energía diseñado por el grupo de personas que trabajan para el Cheney. La Administración en evidente desafío a la ley, se rehusó a dar a cononcer al Congreso los reportes de la reuniones del grupo de personas que trabajan para el Cheny.
9. Es superfluo señalar que las grandes ganadoras de todo esto parecen ser las compañías que en las últimas elecciones dieron jugosas donaciones exclusivamente al Partido Republicano ( no se trata de sugerir que los demócratas sean menos susceptibles a dejarse influenciar por el dinero,
10. La historia de la administración bush se está comenzando a parecer a la trama de Victor/Victoria. Primero teníamos un candidato se suponía era moderado. Pero que en realidad era un conservador de línea extrema que aparentaba ser moderado para llegar al poder.
11. Las últimas propuestas económicas de la Administración, como el plan de energía de Cheney, no parecen provenir de unos serios partidarios del libre mercado. Ella no tiene sentido ni desde la perspectiva las terías económicas del lado de la demanda ni de las del lado de la oferta, pero sí le dan mucho dinero a algunas compañías. Entonces, talvez la ideología era sólo otra máscara para una persona que en realidad era el candidato de las corporaciones – un pequeño grupo de compañías con un ocnjunto muy específico de intereses empresariales.
12. Esta es una imagen interesante y muy probable. Pero es una imagen que la mayoría de lagente nunca verá en sus televisores y que muchas personas se rehusarán a aceptar no importa qué tan fuerte se la evidencia. Eso, es lo que hace posible todo esto, en la tierra de los ciergos, el tuerto, barbado y cojo es rey.

ANÁLISIS

A pesar de que el sistema de mercado se maneja por una dinámica interna , el paso y la dirección de su avance están influidos por factores externos. ¿ Será entonces que la cláusula que le da un trato especial al hombre tuerto, barbado y cojo, es un factor externo o es más bien parte de la estructura de la sociedad estadounidense y de su política interna?

¿Dónde podríamos ubicar el escenario que presenta el autor, en la teoría de una economía dual? Analizando el caso en examen en uno de dos sectores: un sector progresista y moderno caracterizado por un alto nivel de productividad, eficiencia e integración económica y un sector tradicionalista, caracterizado por un sistema de producción retro y autosuficiencia local.

Se podría decir que calza en ambos porque a pesar de que estas empresas operan bajo la integración global de mercado, los intereses individuales, racionalidad económica y la maximización de ciertas conductas bajo la bandera de uno u otro partido político sacan a relucir la falta de evolución de ciertas prácticas propias de un sistema, contrario a alcanzar niveles más altos de eficiencia económica e interdependencia global.

El artículo que el autor presenta desde una perspectiva hegemónica, aunque debilitada, de los Estados Unidos, demuestra que las estructuras económicas domésticas son determinantes importantes para que los países se muevan hacia una economía liberal internacional, pero en el caso en cuestión es un ejemplo de dos cosas: Primero, prácticas que van en contra de la no discriminación y del libre mercado. Segundo: el riesgo de que estas prácticas trasciendan las frontera de los Estados Unidos y confirmen la falta de compromiso que tiene los Estados Unidos hacia el libre mercado y más bien a la imposición de sistemas alejados del libre mercado y más apegados a sistemas imperiales. Esto por cuanto el ejercicio de la hegemonía requiere de un sentido general de legitimidad y con este tipo de acciones se desnaturaliza la poca legitimidad que guarda el hegemón, y peor aún se confirma el desprestigio de sus políticas internas que trascienden al sistema político y económico internacional.

Asimismo se confirma que el comercio, liderado en este caso por las mineras y petroleras, cayó en la tentación de mantener beneficios a costa de otros , justificándose en el libre mercado. ¿Qué tan libre es el mercado cuando por factores externos de la agenda doméstica de un país cae en la tentación? Se pierden aquí los argumentos de eficiencia productiva, crecimiento económico y la integración de mercados nacionales, resultando más bien en una falta de redistribución del poder económico e industrial haciendo que a los ojos de los observadores externos, los Estados Unidos pierda más y más control en el contexto de una economía moderna y dinámica.

Con las propuestas económicas de la Administración como el plan de energía de Cheney, se ignora si se beneficia el crecimiento o más bien la subsistencia de un sector de la economía que si se deja al libre mercado puede que éste se encargue de limpiarlo y reestructurarlo. Con este tipo de políticas públicas que benefician a unos pocos, llevaría razón Schumpeter en indicar que las ganancias y altos ingresos en inversiones se dan debido a la existencia de monopolios. Asimismo, lo indicado por Smith´s que cada empresario aspira a ser monopolístico para así disfrutar de ganancias de monopolio o rentas.

¿Será este caso un ejemplo de la falta de capacidad de ajuste que tiene la política interna de los Estados Unidos y otros países que no están exemptos de este tipo de acciones respecto a ciertos sectores, en detrimento de la eficiencia y estabilidad de ciertas actividades económicas?

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